A los 12 años un niño no puede viajar sólo, sin autorización paterna. Ni trabajar, ni conducir u
A los 12 años un niño no puede viajar sólo, sin autorización paterna. Ni trabajar, ni conducir un vehículo, incluida la más humilde de las motocicletas. Ni puede entrar a determinados espectáculos, ni pernoctar en una habitación de hotel, aunque tenga dinero, si no va acompañado. Y eso sucede en toda la Unión Europea. Pero a los brillantes cerebros del secesionismo de Cataluña se les ha ocurrido que se puede cambiar de sexo a partir de los doce años. Y les expedirá un carnet catalán, que no será válido en ninguna parte de España, ni de Europa. Me pregunto, si en Cataluña a los 12 años se podrá cambiar de padre y madre. Porque si yo tuviera doce años, y fuera hijo de estos legisladores secesionistas, me gustaría cambiar de padre y de madre.