La pielonefritis es una infección del tracto urinario que afecta a las vías urinarias y al riñón. Es más grave que una cistitis, porque la infección asciende desde la vejiga hasta el riñón, pudiendo comprometer la función de este órgano y causar complicaciones si no se trata de manera adecuada.

Los síntomas de la pielonefritis incluyen fiebre alta, escalofríos, dolor lumbar o en el costado, náuseas, vómitos y, a menudo, molestias urinarias como escozor o aumento de la frecuencia.

La pielonefritis puede presentarse de manera aguda, con síntomas intensos y bruscos, o de forma crónica, cuando existe un daño estructural o funcional que favorece las infecciones recurrentes.

Es una infección más frecuente en mujeres jóvenes y en embarazadas, pero también en personas con cálculos renales, malformaciones del aparato urinario o sistemas inmunitarios debilitados.

Reconocerla a tiempo es clave, ya que si no se trata correctamente puede derivar en una infección muy grave y generalizada, conocida como sepsis, o en insuficiencia renal.