El sueño es una necesidad fisiológica básica para nuestro bienestar y para un correcto funcionamiento de nuestro organismo.

Una necesidad fundamental a lo largo de nuestra vida, pero especialmente en la edad infantil.

De hecho, las necesidades de horas de sueño van cambiando y hablamos por ejemplo de entre 14 y 17 horas de sueño en los recién nacidos hasta las 8 – 10 horas en adolescentes.

El sueño es especialmente importante durante la niñez y la adolescencia.

Porque es esencial para el desarrollo cognitivo, pudiendo afectar unos malos hábitos de sueño a la capacidad de atención y aprendizaje.

Y porque además, durante el sueño, se producen importantes funciones fisiológicas, como la reparación muscular o la secreción de hormonas relacionadas con el desarrollo físico, principalmente la hormona del crecimiento.

¿Y tú?

@ProcterGamble